¿Es la primera vez que entras al blog? Descubre cómo usarlo aquí.

martes, 2 de febrero de 2010

Menos humos.

Hola a todos/as,

Cuando tratamos en el anterior tema el apartado de las drogas, os vi realmente interesados en el tema. Como seguro que a muchos de vosotros os habrán ofrecido probar, al menos, el tabaco, vamos a empezar a conocerlo a fondo.

El tabaco es una droga legal, es decir, es tóxica, y genera dependencia y tolerancia como cualquier otra, pero está más extendido su uso simplemente porque el Estado controla su distribución y consumo. Al mirar una cajetilla de tabaco podemos encontrar algunos de sus componentes, pero desde luego, no todos.


Un cigarrillo apagado contiene más de 4.000 compuestos químicos distintos, 43 de los cuales son tóxicos. De hecho, entre ellos encontramos compuestos que también se utilizan como quitaesmalte, como producto de limpieza, como disolvente, como corrosivo, como combustible, como tintas, como plásticos, etc.

Otros son residuos nucleares y los hay que fueron utilizados en las cámaras de gas utilizados en el holocausto judío de la II Guerra Mundial por su alta toxicidad y la rapidez con que producen desfallecimiento, intoxicación o la muerte. Además hay compuestos del tabaco que se utilizan como herbicidas, fungicidas o insecticidas; es decir, que matan hierbas, hongos o insectos, y desde luego lo que mate a otros seres vivos también nos matará a nosotros.

Por si fuera poco, al quemarse un cigarrillo se alcanzan temperaturas cercanas a los 1.000ºC, lo que transforma algunos componentes químicos y puede generar hasta 1.000 sustancias de las que muy pocas se conocen y muchas entrarían en el cuerpo al ser inhalado el humo.

A pesar de todo esto, seguro que piensas que hay alguna ventaja que tiene el tabaco. Te animo a que me la dejes escrita aquí abajo, y podremos evaluarla. Si no encuentras ninguna, no empieces a fumar; y si ya has empezado, deja de fumar cuanto antes. Tu médico, tu familia y quien te quiera siempre te ayudará a dejarlo, pero es necesaria tu fuerza de voluntad.

Un saludo,
Ramón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario